miércoles, 9 de mayo de 2007

Metablog

Esta semana ha sido una de las más aburridas de mi vida, he tenido que aparentar estar preocupado por los exámenes y etc... Lo peor es que he creado un blog y no estoy siendo creativo en su administración, jaja. Siento que cada cosa que pongo es predecible y banal, lo peor de todo es que no hay retroinformación... si al menos alguien quisiera burlarse de mi abulia... anímense criaturas virtuales

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me animo a burlarme de un blog, que, sin duda, es el primero que me sorprende y engancha. Sinceramente, he leído pocos, tan pocos que sé cuantos son, 3, contando el tuyo. Tengo un cierto desprecio hacia este tipo de medio de comunicación, aunque no sabría explicarlo con argumentos claros.
Fue raro cómo llegué aquí. Tengo una exposición de teatro francés para el lunes y no sé porque clikie en una foto, wualá, Blog.
La foto es del pequeño texto que escribes sobre "Demonios en la piel".
Reiterando, no sé cómo llegué, pero llegué; para entretener los domingos rutinarios y absolutistas.
Ahora la incertidumbre invade mi mente, las constantes preguntas a cerca de la persona de tras de la pantalla, o en este caso, de tras del blog, letras, oraciones, frases, fotos y videos. ¿Cómo se llama? ¿Cuántos años tiene? ¿Qué estudia? ¿Dónde vive? ¿Quién es? ¿A qué se dedica?... preguntas clásicas de un Chat, con otra entonación, pero quién sabe si es el mismo fin.
Escribes del hi5, escribo del blog. Una foto esplendorosa, rimbombante y excitante fácilmente se puede comparar a estos escritos cautivadores.
Pides burlas y respondo con alegorías.
Tengo ganas de escribirte mucho más, pero siento que es inútil; la era informática (como una de las canciones de Drexler) quita todo romanticismo y placer a esta sutil muestra de afecto.
Ahora pasa por mi mente un intento inexplicable de darte mi mail, o mi link de hi5. También pasa la súplica de una respuesta. Aunque todo se ve atrofiado por la malignidad de las computadoras, que abren puertas permitiéndote ver que hay mil puertas más que abrir.
Todos estos pensamientos colapsan ahora por la conciencia y lucidez que me dejan ver los siguientes desafortunados pasos.
El arte rodeador de una página web personal impacta, en especial a mí. Es difícil terminar, más aún, al sentir vergüenza por el desorden de ideas planteado en este comentario. Además de la culpabilidad que siento, tengo novio y creo que se puede molestar por un comentario de esta índole.
Te pido que no lo aceptes, ya es hora de terminar. Por último, me llamo Max.

Pd: Sigue escribiendo, seguiré leyendo.